Detox o Desintoxicación: ¿qué es?
La detoxificación, detox o desintoxicación es un proceso natural que posee nuestro organismo en condiciones normales para neutralizar, transformar o eliminar las toxinas que pueden llegar a impedir el normal funcionamiento del cuerpo.

«Tu cuerpo es templo de la naturaleza y del espíritu divino. Consérvalo sano, respétalo, estúdialo, concédele sus derechos«
Henri Frédéric Amiel
¿Qué órganos intervienen naturalmente en un proceso Detox?
Órganos de eliminación
Aquellos que tienen la capacidad de drenar las toxinas. Por lo tanto interviene el hígado, que descompone, transforma y/o neutraliza las sustancias tóxicas. Posteriormente los residuos pasarán a ser excretados a través de las heces o de la orina, por lo que los intestinos y los riñones también ejercen un papel fundamental en este proceso.

Sistema linfático y sanguíneo
En la desintoxicación también participa el sistema linfático y el sistema venoso, que intervienen en el transporte de sustancias desde el entorno celular, llamado «matriz extracelular», a la sangre y a la linfa. Posteriormente pasan desde allí a los órganos de eliminación.

Piel y barreras naturales
Y finalmente, mediante el sudor y la evaporación, participa la piel como órgano eliminador de toxinas, pero que al mismo tiempo, sumado a las mucosas y a la flora bacteriana, desempeñan un importante papel de barrera natural.
Sin embargo, este proceso de desintoxicación natural puede verse interrumpido, alterado o ineficiente por razones que se exponen a continuación y entonces es necesario, iniciar un trabajo de desintoxicación, que de manera eficiente, puede acompañarse de un profesional experto.
¿Cuándo se ve alterada la desintoxicación natural?
Cuando ocurre:
- Saturación de los órganos y sistemas encargados de la desintoxicación, alterándose su normal funcionamiento.
- Ingresa una mayor cantidad de toxinas que superan la capacidad de eliminación, no solo por las provenientes del ambiente, sino también por las generadas en los procesos de degradación que se efectúan en el organismo.
- Trastornos en las barreras naturales.
- Deficiencia en el transporte de los residuos.
- Exposición diaria y continua a sustancias que pueden ser perjudiciales para la salud, como las procedentes de:
- Productos con ingredientes sintéticos que nuestro cuerpo no está adaptado a asimilar, como los procedentes de cosméticos y productos de higiene personal: parabenos, sulfatos, entre otros.
- Pesticidas y aditivos alimentarios.
- Microorganismos.
- Contaminación ambiental.
- Conductas nocivas; el estrés crónico interviene en la liberación de señales químicas en el cuerpo, como el cortisol y la adrenalina que, en altas cantidades, pueden llegar a alterar el normal funcionamiento del cuerpo y conllevar a la enfermedad.
Toxicidad: cuando llega la hora de realizar Detox con ayuda externa
Por eso, debido a que el ser humano está en constante exposición a toxinas, se recomienda un proceso de detoxificación en cualquier momento.
Especialmente

Es recomendado realizarlo al menos una vez al año, con el fin de optimizar la salud, prevenir enfermedades y contribuir en su tratamiento.
Y de manera inmediata si está teniendo síntomas como:
- Agotamiento
- Hinchazón
- Ansiedad, irritabilidad
- Aumento de peso
- Canas a temprana edad y/o arrugas prematuras
- Acné
- Trastornos del sueño
- Flatulencias
- Alergias a repetición
- Tiene predisposición a migrañas, diabetes, hipertensión arterial, sobrepeso o cáncer.
¿En qué consiste un plan detox?
Consiste en potenciar la función normal de sus órganos eliminadores, evitar el reingreso de toxinas y fortalecer sus barreras naturales.
No es suficiente con una sana alimentación si es sedentario. Tampoco basta con ser deportista e ingerir toxinas contenidas en los aditivos y conservantes de suplementos nutricionales. Y seguirá siendo insuficiente si, pese a que lleva una sana alimentación y realiza ejercicio, vive su vida con estrés, preocupaciones o conductas nocivas.
De aquí la recomendación de que cada persona acceda a la guía de un profesional de la salud que le brinde el apoyo, los conocimientos y los medicamentos necesarios para favorecer el buen funcionamiento de sus órganos, para fortalecer sus barreras naturales de protección contra las toxinas, para equilibrar sus emociones y consolidar sus cualidades de resiliencia al estrés.