Tener un banco de leche materna en casa ofrece una forma conveniente y nutritiva de alimentar a los recién nacidos y lactantes, incluso cuando las madres están ocupadas.
Además de brindar la leche de la madre, este banco permite que los cuidadores administren leche donada. Descubra cómo este recurso evita gastos en fórmulas lácteas industriales y ayuda a las madres a mantener la salud de sus bebés.
Beneficios del banco de leche materna
Un banco de leche en casa no solo asegura una nutrición natural para los bebés, sino que también elimina la necesidad de fórmulas lácteas costosas y favorece la prevención de enfermedades. Es especialmente útil para mamás con producción excesiva de leche, ofreciéndoles la opción de almacenar o donar su excedente.
Creando su propio banco de leche materna:
1. Prepare el recipiente para almacenamiento:
Elija un recipiente de vidrio con tapa de rosca y siga estos pasos: a. Hierva el recipiente en agua durante 15 minutos para esterilizarlo. b. Seque externamente y rotule el recipiente con la fecha y hora de extracción. c. Deposite la leche en el recipiente.
2. Extracción de la leche materna:
a. Asegúrese de una higiene adecuada, recoja el cabello y lave sus manos. b. Sujete el seno en forma de «C» (pulgar sobre la parte superior del pezón) y extraiga suavemente la leche, empujando la mama hacia el tórax y en seguida «exprimiendo» suavemente hacia adelante, varias veces para extraer la leche. c. Almacene la leche en el frasco esterilizado.
Opcional: Utilice utensilios succionadores, para mayor comodidad. No olvide su previa esterilización.
3. Almacenamiento casero de la leche materna:
Llene y cierre los frascos. Considere estos tiempos de vigencia: a. Temperatura ambiente: 4 a 6 horas. b. Refrigerada: 24 horas. c. Congelada: 15 días a 2 meses.
4. Uso del banco de leche casero:
Administre la leche según la temperatura: a. A temperatura ambiente: usar máximo en 6 horas. b. Refrigerada: caliente en baño maría a fuego bajo (evite el microondas). c. Congelada: descongele en el refrigerador y luego caliente en baño maría.
5. Administración:
Use una jeringa, cuchara o vaso pequeño según la edad de tu bebé, evitando chupos y biberones.
Idealmente jeringa hasta los 6 meses de edad, cuchara hasta el año de edad y de un año en adelante un vaso pequeñito.
Conclusión
Un banco de leche materna en casa es una valiosa herramienta para garantizar la nutrición de su bebé de manera natural y saludable. Con los pasos simples mencionados anteriormente, puede crear y mantener este recurso esencial para su bebé y, si lo desea, para apoyar a otras mamás en su viaje de crianza.
Si considera que esta información podría ser útil para alguien más, le animo a compartirla con quienes puedan beneficiarse de ella.
Iveth Ussa
Médica de atención primaria especializada en medicina biológico-naturista y en terapias complementarias. Mi misión es ayudar a las personas a alcanzar su bienestar integral, equilibrando su naturaleza interna con su entorno. A través de mi experiencia y conocimiento, estoy comprometida en brindar consejos y recursos para mejorar la salud y la calidad de vida de mis lectores y pacientes.